Para muchos, deportes como la natación o el atletismo, son de las disciplinas que más esfuerzo físico exigen en el mundo del deporte. Y pensar que se podrían realizar con alguna limitación física es poco usual. Sin embargo, para para Michael Villar, la pérdida de una de sus extremidades inferiores ha significado una razón más para seguir representando de la mejor manera a las islas en el mundo.
Con el eslogan Nadando por la inclusión, la discapacidad no es una incapacidad, Villar, junto con su compinche Carlos Moreno, hijo del experimentado entrenador de natación, Carlos Julio Moreno, se han propuesto darle la vuelta nadando sin parar a Providencia y Santa Catalina.
La idea, que nació como un sueño personal de Michael, se realizará el 3 de diciembre, ya que es el día internacional de la discapacidad. La idea es alcanzar el record Guinness, hecho que conocen no ha realizado nadie hasta el momento, “desconocemos si alguien ha nadado continuamente este recorrido con una discapacidad y que le hayan dado la vuelta a Providencia y Santa Catalina nadando.
Para esta travesía, Villar se ha estado preparando por más de 7 meses, un proceso que han trabajado básicamente con sus uñas, como él mismo menciona “inicialmente fue un propósito personal, pero no lo había hecho porque no estaba en el momento, y me he dado cuenta que para necesitaba recursos económicos y logísticos que fortalezcan el proceso, porque la idea es darle la vuelta a San Andrés el otro año, sin aletas y sin ningún tipo de ayuda técnica”. Experiencia que ya ha vivido, pero en 3 fases, donde nadó más de 10km en cada una, y que espera el otro año hacerlo sin parar en 24 horas.
La odisea también busca dar un mensaje de igualdad, a pesar de las limitaciones físicas, todos están en capacidad de hacer lo que se propongan y son aptos para funcionar en sociedad. La idea, entonces, “es mandar este mensaje tanto nacional como internacionalmente, y visibilizar al departamento”.
En esta propuesta, Villar también está abriéndole el espacio al privado, y en general a quien desee, para poder adquirir una prótesis competitiva de alto rendimiento, que le permita mejorar sus condiciones en competencia de triatlón, así como una prótesis que le dé la facultad de tener una mejorar calidad de vida. Todo esto lo han venido haciendo con el apoyo del Club Ultramar, que busca a su vez fortalecer el triatlón en el departamento, pero que, además, enseña deporte para la vida.
Michael expresa que fue en Ultramar donde aprendió a nadar y adquirió sus bases para el triatlón. “Gracias a ellos pude pertenecer 6 años a la liga de Bogotá, donde fue selección Colombia paralímpica. Hice un proceso bonito en la capital, pero por una lesión me mantuve 2 años sin hacer deporte”. Al reincorporarse, regresó a San Andrés y volvió al Club Ultramar, y “todo fluyó y pude recuperarme e incorporarme a las actividades nuevamente, y en este caso al triatlón”.
“Quiero hacerle una invitación a toda la comunidad, todo aquel que quiera y pueda colaborarnos, lo más mínimo, será infinitamente agradecido”. Para ello, dispone de la cuenta de ahorros Bancolombia 348195965591.